viernes, 29 de abril de 2016

La patria de la anarquía Samaria Márquez Jaramillo




Finalizaba el siglo XX, transcurría 1997 y una nueva palabra llegó a mi vocabulario: Ciberespacio, traída a mí desde Suiza. Allí John Perry Barlow escribió la Declaración de independencia del ciberespacio en la que exhortaba a los gobiernos a no ejercer soberanía sobre El nuevo hogar de la Mente, patria de la anarquía, y que dice: 


Vengo del Ciberespacio, el nuevo hogar de la Mente y en nombre del futuro os pido ,gobiernos del mundo, que nos dejéis en paz. Vosotros, cansados gigantes de carne y acero, no sois bienvenidos entre nosotros. No ejercéis ninguna soberanía sobre el lugar donde nos reunimos. No hemos elegido ningún gobierno, ni pretendemos tenerlo. Declaro el espacio social global, que estamos construyendo,  independiente por naturaleza de las tiranías que estáis buscando imponernos. El Ciberespacio no se halla dentro de vuestras fronteras. No conocéis nuestra cultura o nuestra ética. Proclamáis que hay problemas entre nosotros que necesitáis resolver. Usáis esto como una excusa para invadir nuestros límites. Muchos de estos problemas no existen. Donde haya verdaderos conflictos, donde haya errores, los identificaremos y resolveremos por nuestros propios medios. Estamos creando nuestro propio Contrato Social. Esta autoridad se creara según las condiciones de nuestro mundo, no del vuestro. Nuestro mundo es diferente. El Ciberespacio está formado por transacciones, relaciones, y pensamiento en sí mismo, que se extiende como una quieta ola en la telaraña de nuestras comunicaciones. Nuestro mundo está a la vez en todas partes y en ninguna parte, pero no está donde viven los cuerpos. Estamos creando un mundo en el que todos pueden entrar, sin privilegios o prejuicios debidos a la raza, el poder económico, la fuerza militar, o el lugar de nacimiento. Estamos creando un mundo donde cualquiera, en cualquier sitio, puede expresar sus creencias, sin importar lo singulares que sean, sin miedo a ser coaccionado al silencio o el conformismo. Vuestros conceptos legales sobre propiedad, expresión, identidad, movimiento y contexto no se aplican a nosotros. Se basan en la materia”.


Obsesionada  por las palabras, estado que me poseía desde que aprendí a leer, investigué sobre el término ciberespacio. Supe que ciberespacio, actualmente habitante de nuestro  lenguaje, fue puesta en circulación por William Gibson y utilizado por primera vez en el cuento de ese autor, titulado Quemando cromo  y popularizado en la novela, de ese mismo autor, Nigromante, palabra que se refiere a menudo a los objetos e identidades que existen dentro de la misma red informática mundial y es un  título proveniente de la composición de los términos "neuro" (mental) y "mante" (sujeto o actor de "mancia", que significa adivinación y por extensión magia, por ejemplo nigromante, quiromante.

jueves, 28 de abril de 2016

El monstruo partidario de la eugenesia

El monstruo partidario de la eugenesia
Samaria Márquez Jaramillo
¿Recuerdan quién fue Laureano Eleuterio Gómez Castro? Daré algunas pistas: Le echaron encima algunos apodos: el Hombre Tempestad, el Monstruo, el Basilisco, porque emitía con claridad sus opiniones, pero lo hacía con el propósito de destruir a sus contrincantes a quienes desprestigiaba y contra quienes arremetía con furor extremo.
Fue un periodista, ingeniero y político colombiano, presidente desde agosto de 1950 hasta 15 meses después. Por motivos de salud nombró a Roberto Urdaneta Arbeláez como su reemplazo interino y el 13 de junio de 1953 cuando decidió reincorporarse a su cargo, fue derrocado por un golpe de Estado del general Rojas Pinilla. Si, ya saben. Ese incisivo personaje es Laureano Gómez quien abominó de su nombre Eleuterio y de su apellido materno. También imprecó de muchísimas más circunstancias y elementos.

El sobrenombre del Monstruo no se lo gano a pulso. Sucedió que en Bogotá, en una conferencia en el Teatro Colón, en junio de 1928, en la que reveló su racismo aseguró que el estado incivilizado en que vivían las poblaciones negras en la zona de la costa atlántica, se debía a la inercia y el letargo producto del medio ambiente: Sol relumbrante, negra ardiente, sexo maniaco, ron como pan nuestro de cada día, y que, “peor aún, la región del Caribe se formó por el espíritu del negro, rudimentario e informe, que permanece en una perpetua infantilidad y es mentirosos y adoradores de falsas imágenes, los negros pertenecen a la raza  salvaje, que aporta los elementos bárbaros de nuestra civilización”.


La acusación laureanista clamaba por el uso de la eugenesia en Colombia, promovido por un grupo cosmopolita ilustrado que abogaba por la práctica de la ciencia del mejoramiento de los linajes, mediante la aplicación de la eugenesia, en intento de obrar por encima de la naturaleza que  cuando un embrión no está capacitado para sobrevivir, suele morir en etapas iníciales de gestación, dentro del útero materno.¡Monstruo!
Laureano Gómez aplaudió la selección, en manos humanas. Las criticas se  volvieron aluvión e hicieron decir a Laureano Gómez: “Ni porque te alaben serás mejor, ni peor porque te vituperen. Lo que eres eso eres. He aquí por qué no temo a la crítica sino que antes la incito y la provoco. Yo sé que mis palabras de verdad, que desasosiegan y encolerizan a los parásitos que viven de la savia de la República, encuentran eco en los corazones desinteresados y puros de los buenos ciudadanos. Eso me satisface. Eso me basta”.
Los fascistas de cualquier nacionalidad tienen pensamiento similar.Rudolf Hess, el segundo en el mando después de Hitler, afirmó que el nazismo era “biología aplicada”. Y esta idea se convirtió en política de estado.

En la dictadura de Hitler, inmediatamente después de que echó debajo la suela de sus botas las instituciones culturales y educativas,  los nazis pregonaron la Ley de Salud Marital de octubre de 1935, que prohibió las uniones entre “saludables.

Para Hitler y otros líderes del movimiento nazi, el valor último de un ser humano no reside en su individualidad, sino en su pertenencia a una colectividad racialmente definida. El objetivo principal de un colectivo racial era garantizar su propia supervivencia. Para los nazis, este instinto colectivo de supervivencia siempre implicaba salvaguardar la pureza de la “raza”. Como la ley de la compensación es insobornable, en el último año de la II Guerra mundial, los jóvenes arios salvaron su vida gracias a las transfusiones de sangre de africanos, porque en Alemania el banco de sangre no daba saldo, ni siquiera rojo.


martes, 26 de abril de 2016

PERIODISMO IMPRESO TAMBALEA

Periodismo impreso tambalea.Samaria Márquez Jaramillo

El periodismo impreso  se encuentra en un momento en el que su hegemonía como medio imperativo de las noticias está tambaleando, empujado por la tecnología, por los nuevos competidores y en mayor número y ventajas, por los blogs que armados  con herramientas de edición web, fácil de usar, está aventajando largamente la eficiencia de los diarios impresos.


Conexiones permanentes y dispositivos móviles cada vez más potentes, y sobre todo, los lectores en línea, le arrebataron  la supremacía a la información escrita tradicional porque  los blogs  tiene como canal de distribución el que es inmediato: el Internet, en el que  los ciudadanos acuden  a medios de comunicación interpersonales, como los correos electrónicos, los foros o los blogs, que son publicaciones en la web en las que, de manera cronológica, pero sin periodicidad establecida, el autor o los autores publican comentarios, notas o artículos.

Estos textos, conocidos como posts en la jerga de los blogueros, suelen incluir enlaces, y también. eventualmente imágenes y otros contenidos multimedia. Asimismo, es frecuente que ofrezcan espacios para el comentario, donde los lectores puedan expresar libremente sus opiniones y observaciones acerca de cada una de las notas.
Si bien no hay consenso en cuál fue el primero, entre 1993 y 1994 se reportan las primeras manifestaciones de weblogs, aunque el término no es acuñado sino hasta 1997 por Jorn Barger.
Me dediqué, en serio, a integrarme a la blogosfera, hace menos de un mes. Los primeros días tuve 10 u once lectores. Fui aumentando exponencialmente y ahora tengo alrededor de 270 entradas diariamente,  de diferentes países y, lógico, más de la mitad de ellos desde Colombia.
Entiendo el humano afán por nombrarlo todo, por categorizar, por convertir sensaciones, emociones o ideas en conceptos y palabras. Lo padezco, pero recientemente se ha ido mermando en mí este afán pues no pretendo entender el cosmos ni la existencia, sino sentirme viva e inmersa de manera activa en mi propia vida, sin mitos exógenos, porque, a su vez, las tecnologías no sólo no lograron desterrar los mitos de la humanidad sino que, por el contrario, están aportando nuevas alegorías de la cultura tecnológica, dando lugar a una variedad de tecnomitos: el del hombre tecnológico y su rechazo del cuerpo en pos de habitar el espacio virtual, el de la metamorfosis tendiente al hombre-máquina, el del hombre como herramienta de la tecnología, vale decir, el hombre convertido en la herramienta de su propia herramienta.

No es mi intención sumirme en una discusión de filosofía de la tecnología, o escribir sobre los tecnomitos. Ese oficio se lo dejo a los que, a la par del soberbio desarrollo tecnológico, crean otro género de relatos y narraciones míticas, disfrazados con los ropajes de las nuevas alegorías de la cultura tecnológica. Tampoco me importa  la obsesión de la juventud por convertirse en máquina, en imitación a la nueva estirpe de monstruos, como Terminator y Robocop. Solo me interesa escribir y que me lean, sin fijarme temas cliché y que día a día continúe creciendo mi audiencia en la web.


lunes, 25 de abril de 2016

La Tebaida rinde homenaje a la memoria de José Jaramillo Vallejo y Samaria Márquez Jaramillo

Gracias a La Tebaida
Samaria Márquez Jaramillo



Un día me encontré con Alexander Carvajal, secretario de cultura de La Tebaida y hombre exitoso en el área de Teatro. Hablamos de mi recientemente publicada novela histórica, Los nietos del exilio,de Ediciones Áltera, Sello Lácre, colección Maestros de la novela histórica, y él tuvo la idea de presentarla en La Tebaida. Hugo Buitrago, director de la Junta del centenario, aprobó la idea y la alcaldesa Patricia Buitrago la avaló y apoyó. Entonces ellos empezaron a trabajar en la preparación del evento.
¿Cómo sería la presentación? ¿Cuál el programa? ¿Qué estilo tendrían las tarjetas de presentación? ¿Cómo el diseño del lugar de eventos de la Casa de la cultura? Y siguieron pensando en borrador hasta que tuvieron el excelente programa con el que celebraron el día del idioma y la presentación de mi novela, el reciente viernes  22 de abril, en la Casa de la cultura de La Tebaida.
Cien personas asistieron. El decorado fue hermoso: Una pared de fondo, recubierta con metros de satín colores blanco rosa y verde, los colores de la bandera municipal; a un lado de la mesa principal, debajo del árbol que tutela  el señorío y belleza del patio ornamental, organizaron un área de lectura, decorada al estilo siglo pasado: Dos sillas vienesas  y cerca varios ejemplares de obras famosas, que fueron obsequiadas. Allí, tres niñitas, vestidas de chapoleras, se mecían en las sillas mientras leían la novela de la autora tebaidense que ese día era presentada. Impactaba la belleza del cuadro. Allí, con seguridad, trabajó el conocimiento de escenografía que tiene Alexander Carvajal. La ambientación era romántica y estética.

Como parte integral del acto de presentación de los Nietos del Exilio, se leyó un mensaje enviado por el escritor español Luis Folgado de Torres, editor de Ediciones Áltera, en el que el escritor autor de El hombre que compraba gigantes, demostró con una hermosa prosa, lo inútil de la Guerra civil española y lo pueril de los motivos que desataron semejante daño entre hermanos.


El  programa de la actividad incluía un  homenaje a la memoria del propulsor del progreso en La Tebaida y padre de Clara Luz Jaramillo de Botero y Doloritas Jaramillo de Jaramillo, quienes heredaron el espíritu generoso y benefactor de su padre. Transcurrió un minuto de silencio en conmemoración de José Jaramillo Vallejo, quien en vida había entregado ideas, recursos y apoyo total, en el paso de La Tebaida, corregimiento de Armenia, a municipio. El minuto fue muy emotivo, notoriamente se percibía que en el recuerdo se sentía cercano esa persona especial a cuya memoria se rendía homenaje y gratitud.



La presentación de la novela estuvo a cargo del abogado y humanista Cesar Ramirez Cuartas. Quien hizo un recorrido sobre las 4, en una, narraciones, contenidas en las páginas del libro, lo que se constituyó en una presentación literaria magistral.
Luego hubo un  concierto de guitarra y la intervención vocal de niños estudiantes de canto. Después  la autora del libro se dirigió, emotivamente, a los presentes e hizo entrega, a sus amigas de la niñez,  de varios ejemplares de la obra presentada. Esta parte del programa hizo que  tanto los espectadores como las amigas que se reencontraron lloraran, conmovidos.



De este acto cabe destacar la excelente organización que Hugo Buitrago, director de la Junta del centenario de La Tebaida, le imprimió así como su acierto y su éxito como presentador y coordinador general del evento y el empeño estético y logístico del director de Teatro Alexander Carvajal.
Con las emociones en una nota altísima se dio por terminado, oficialmente en La Tebaida, el Día de Cervantes, de los escritores y la presentación de la Novela Los nietos del exilio.
Ahora es mi turno: Gracias a la ciudadanía de La Tebaida, a su alcaldesa, Patricia Buitrago, a los organizadores del evento, Hugo Buitrago y Alexander Carvajal, al presentador de la obra literaria, abogado y humanista, Cesar Ramirez Cuartas, a Clara Luz Jaramillo de Botero quien hizo viva y tangible, en la conmemoración, la presencia de su padre, a mis amigas de la infancia, que añoro y a la que me aferro. Por todos,  mi novela Los nietos del exilio fue presentada en mi pueblo natal, mediante el análisis literario del pensamiento de los personajes, en un entorno hermoso y rodeada de las personas que conforman mis recuerdos, hermosos, de mi niñez y juventud, que hacen que el nombre de mi pueblo siempre lo pronuncie yo con respeto y orgullo.
De la mayoría de mis  coterráneos contemporáneos  conozco sus ancestros y ellos, a su vez, saben cuánto los quiero y la permanente difusión que hago de nuestro pueblo, ante el mundo.




En la novela histórica que presenté dije de mi pueblo: “En mis novelas soy reiterativa con respecto a La Tebaida, mi pueblo, porque de sus entresijos surgí y a mi origen rindo tributo: Es verdad, mi ascendencia es mucho más que ‘ese viejo terco y poblador’, que ante su fracaso intelectual de arriero, a punto de verraquera dejó testimoniado que, más allá de sus sueños de grandeza grecoquindiana, legaba a sus descendientes el espíritu invicto de Tebas, la ciudad que dio nombre a ese pedazo de tierra, desbrozado por manos honradas, que amo. Esta novela la ofrendo a la memoria de José Jaramillo Vallejo que con su ejemplo de creador de progreso y de hacedor de bienestar humano enseñó que el mañana no llega cuando termina la noche sino cuando la sociedad viva auroras de cambio, en términos sociales, políticos  y económicos. Ese amanecer es, también, propósitos de los descendientes de quien fuera no solo creador de progreso sino una mano amiga, extendida con sinceridad.



Las fotografías que aparecen en este artículo son de autoría de Estefan Restrepo, coordinador de información y prensa de la alcaldía de la Tebaida. Para todos los funcionarios de la Alcaldía un abrazo de agradecimiento.







domingo, 24 de abril de 2016

FALSEDADES EN TORNO AL QUIJOTE Samaria Márquez Jaramillo

FALSEDADES EN TORNO Al QUIJOTE







 “Con la Iglesia hemos topado, amigo Sancho”, es una frase falsamente atribuida a Cervantes Saavedra, en el Quijote, porque no aparece así en la novela cervantina. La frase se suele usar con un sentido de crítica al poder de la Iglesia. Sin embargo, en el pasaje del Quijote que se cita como referencia a la Iglesia  se comprueba  que don Quijote no se refiere a la Iglesia como institución, sino a la iglesia del pueblo (escrito con minúscula), y no dice “hemos topado, amigo Sancho“, sino „hemos dado, Sancho“.


De todos modos, esta falsa cita se convirtió en frase hecha. A veces se aplica a toda clase de cosas o instituciones que ejercen cierto poder del que no es fácil librarse. Así es el comentario, textual, que aparece en el texto del Quijote

 «Y advierte, Sancho, que yo veo poco, [o] que aquel bulto grande y sombra que desde aquí se descubre la debe de hacer el palacio de Dulcinea.
-Pues guía vuestra merced – respondió Sancho -: quizá será así; aunque yo lo veré con los ojos y lo tocaré con las manos, y así lo creeré yo como creer que es ahora de día.
Guió don Quijote, y, habiendo andado como doscientos pasos, dio con el bulto que hacía la sombra, y vio una gran torre, y luego conoció que el tal edificio no era el alcázar, sino la iglesia principal del pueblo. Y dijo:
-Con la iglesia hemos dado, Sancho.
-Ya lo veo – respondió Sancho -; y ruega a Dios que no demos con nuestra sepultura, que no es buena señal andar por los cementerios a tales horas, y más, habiendo yo dicho a vuestra merced, si mal no [me] acuerdo, que la casa de ésta señora ha de estar en una callejuela sin salida.
-¡Maldito seas de Dios, mentecato! – dijo Don Quijote -, ¿Adónde has tú hallado que los alcázares y palacios reales estén edificados en callejuelas sin salida?
-Señor – respondió Sancho -, en cada tierra su uso…


Leídos los anteriores renglones no cabe duda de que tal expresión debe entenderse literalmente. Siendo de noche y tratándose de la famosa ciudad del Toboso, no hay por qué ni para qué achacar a Cervantes segundas intenciones. No obstante, la frase – desfigurada en con la iglesia hemos topado – ha levantado una gran polvareda crítica plagada de interpretaciones esotéricas y anticlericales. Lo que  sí se dice en el capítulo nueve de su segunda parte es "con la iglesia hemos dado, Sancho", (ni iglesia con mayúscula, ni topado, ni amigo).
Entonces, la tergiversación que siempre se le ha dado, sin razón  es con  intención anticlerical.
De igual manera es apócrifa la frase “Ladran, sancho, luego cabalgamos”, porque nunca la puso cervantes en boca del Ingenioso Hidalgo. Esa reflexión  no está en 'Quijote' y es sólo una leyenda, al estilo de "amigo Sancho, con la Iglesia hemos topado". Fue Goethe quien escribió: Pero sus estridentes ladridos ,sólo son señal de que cabalgamos




jueves, 21 de abril de 2016

Buscando la paz Samaria Márquez Jaramillo

    Luis Folgado de Torres, escritor español, editor de Ediciones Áltera.

Después de leer un excelente texto del escritor español Luis Folgado de Torres, autor de la obra El hombre que compraba gigantes, pensé que 80 años después del comienzo de la confrontación entre hermanos, en España ,año 1936, como suele suceder siempre, los descendientes de quienes participaron de la Guerra civil española siguen perplejos preguntándose, además de quién ganó la contienda fratricida, qué la generó. Habrá respuestas para todos los gustos: El conflicto social, la anarquía, la ignorancia de la mayoría de los milicianos y todos los etc., que se quieran agregar. Yo tengo mi opinión: Entre tantas causas que pudieron desatar la contienda , no puedo elegir alguna pero si estoy segura que duró mucho más tiempo de los 3 días que se pensaban  como final  de la insurrección. Y ¿saben por qué? Porque fue el campo de batalla de los estalinistas contra los trotskistas quienes, más allá de sus fronteras, usaron su participación en esa Guerra civil para un ajuste de cuentas.
Me sostengo en la idea: España aportó ciudades, vidas, instituciones, generaciones y  hasta Guernica y todo el oro de las reservas y de los museos, para que al interior de las Brigadas extranjeras se fabricaran héroes de opereta; los intelectuales, del mundo entero tuvieran argumento para sus poemas y sus novelas; recibiera un buen apoyo la industria del cine; Franco se sintiera descendiente directo de Dios, mientras que los combatientes de otra guerra: la luchada al interior de las familias, como consuelo repetían consignas publicitarias. Claro que me es muy fácil, sentada cómodamente, con música de fondo, en un ambiente de tarde tibia opinar de una guerra donde no aporté ningún sufrimiento o alguna ayuda y más grato, aún, hacerlo para contestar una  carta, decir gracias  y hacer una reflexión: Nuestra patria, Colombia, hace 70 años está en guerra civil: De una parte los narcoguerrilleros y su ideario económico y de otra la sociedad civil, con sus niños mutilados, el hambre de los desplazados, la familia de los secuestrado y el desconcierto y dolor ante el desfonde de la institucionalidad.Cuántas generaciones tienen que ser desperdiciadas para que entendamos que todos somos fratricidas, aun los que nunca hemos empuñado un arma, porque hemos permitido permanezca esta situación dañina. Reflexionemos, la paz, alcanzada con dignidad, a cualquier otro precio diferente a la entrega legal de este país, es exponencialmente mejor que la verguenza que nos toca sentir cuando presenciamos la miseria de los desplazados, la desnutrición de los niños, el juego al tinmanin que practicamos diariamente para no aceptar las responsabilidades . Un abrazo Samaria
La Guerra Civil Española es, seguramente, el acontecimiento más importante de la Europa de los años treinta y, sin duda, el más dramático de nuestra historia reciente. El 17 del julio de 1936 se inicia una sublevación militar que, tras fracasar, desemboca en una guerra civil de casi tres años de duración. Algo que nunca tuvo que haber ocurrido.



miércoles, 20 de abril de 2016

INVITACIÓN DE LA ALCALDÍA DE LA TEBAIDA







PRÓLOGO de la novela LOS NIETOS DEL EXILIO
novela que será presentada el jueves en ceremonia organizada por los libreros de Armenia y que se cumplirá en el pasaje del Arte, calle 20 Nro 15-25 . El viernes 22 de abril, a las 7 de la noche, la Alcaldía de La Tebaida, en un evento social y cultural hará la presentación oficial de los Nietos del Exilio, en la Casa de La Cultura de ese municipio.Esta novela está circulando en los países de habla hispana, editada y comercializada por Ediciones Áltera, Sello Lácre, colección Maestros de la Novela Histórica.


 No es novedoso enunciar derrumbamientos. Perpetuamente la humanidad hablará de años de cambio. Los colosos, que todos están erigidos sobre grietas, en el tiempo de los tiempos siempre perderán las guerras de civilizaciones, proporcionarán argumentos para escribir novelas históricas y el pretérito no dejará de cimbrarse. La Guerra Civil Española permite que mi imaginación vaya más allá de tal como sucedieron las cosas. Con mirada de novelista veo de otra manera, construyo un pasado diferente, afín con la Literatura, y reproduzco un mismo suceso. Pretendo que quien me lea logre estar al tanto de lo que ocurre, calladamente, en el interior de Los Nietos del Exilio, recuento surgido del apareamiento con Por obra de las Palabras. No busco reivindicaciones. Mi escribir será la transcripción de un pugilato entre lo histórico y lo ficcional. ¿Cuál el legítimo? No es primordial averiguarlo. Al fin y al cabo, el pasado novelado depende de las ideas del autor que intenta litigar contra el olvido.
En mis novelas soy reiterativa con respecto a La Tebaida, mi pueblo, porque de sus entresijos surgí yo y a mi origen rindo tributo: Es verdad, mi ascendencia es mucho más que «ese viejo terco y poblador», que ante su fracaso intelectual de arriero, a punto de verraquera dejó testimoniado que, más allá de sus sueños de grandeza grecoquindiana, legaba a sus descendientes el espíritu invicto de Tebas, la ciudad que dio nombre a ese pedazo de tierra, desbrozada por manos honradas, que amo.

Reconozco que aún para narrar lo registrado en la memoria, las palabras tienen silencios significativos, olvidos deliberados y recuentos manipuladores, porque «en toda circunstancia de la vida, el protagonista es el lenguaje. Esa es una enseñanza de mi esposo, Ramón Casalé i Arán, catalán que padeció en su infancia, en Barcelona, la represión franquista y a quien dedico esta novela que, igualmente, ofrendo a la memoria de José Jaramillo Vallejo, quien en mi primera infancia, en ese tiempo que añoro, con sus narraciones, su ejemplo de creador de progreso y de hacedor de bienestar humano, me enseñó que el mañana no llega cuando termina la inminente noche sino cuando la sociedad viva auroras de cambio, en términos sociales, políticos y económicos. Ese amanecer humano es, también, propósito de los descendientes de quien fuera no solo creador de progreso sino una mano amiga, extendida con sinceridad.

Samaria Márquez Jaramillo







martes, 19 de abril de 2016

Libreros cerca a los sueños de escritores


Libreros cerca a los sueños de escritores
Creía que la felicidad consistía en poder tener y leer gran cantidad de libros. En mi adolescencia imaginé que todos los libreros eran felices: Vivían rodeados de volúmenes, sabían de autores y leían tanto como les permitía su oficio. ¡Si yo pudiera ser librera!, me decía cada vez que confrontaba mis sueños, con lo que prometía mi futuro. Pasaron los años. Me ausenté de La Tebaida, fui a vivir a Cali y mi paseo predilecto era ir por la carrera 12 con calle 10, cerca al Hotel Aristi, a mirar los ejemplares usados que, sobre el pasto del parque de Santa Rosa, vendían los libreros. Me engolosinaba teniendo en mis manos uno y otros tomos, mientras pensaba que eran los vendedores de obras los mejores críticos de Literatura. Había visto que los recicladores y otras personas les traían costales llenos de textos, ellos los sacudían limpiaban y organizaban y, en ese tiempo (transcurría 1965), a unos los valoraban en $5.oo y otros en $10.oo. Un día pregunté: ¿Qué parámetros siguen para valorar así? Las respuestas, expresadas mediante diferentes frases, decían lo mismo: “La experiencia, la buena memoria: algunos de esos libros son solicitados a diario y otros son de autores singulares: de un sólo lector...En consecuencia, valen más los más solicitados”. Lógica reflexiva y acertada
Además de vendedores, son psicólogos: Tienen un saber para compartir con el proyecto de comprador que se les acerca y llega, casi siempre, desorientado a la librería y sale con múltiples universos contenidos en las páginas.

No estaba tan enmarañada cuando quería ser librera y ya era escritora precoz: Podía leer, escribir y ganar para  lo esencial y, a la vez, el librero es el que puede modificar los gustos del lector comprador.

Libreros de Armenia celebran el día del idioma presentando novela de Samaria Márquez Jaramillo


domingo, 17 de abril de 2016

EL ARTE DE RELEER A GABO Y MAL ENTENDERLO

El arte de releer a Gabo  y mal entenderlo
Samaria Márquez Jaramillo
  
      


El 17 de abril de 2014 Gabriel José de la Concordia García Márquez, Gabo, hoy hace dos años, se nos fue volando. Mariposas amarillas lo acompañaban. Él no podía explicar porqué volaban a su lado. Había olvidado hasta a Mercedes Barcha la mujer que amó hasta el último minuto de conciencia cognitiva. Después el Alzheimer lo derrotó  y trajo la hojarasca, en la mala hora que encerró en el otoño al patriarca, luego de que él les adjudicara memoria a sus putas tristes para que continuaran escribiendo la crónica de una muerte anunciada…

En su autobiografía Vivir para contarla Gabo dice. “Lo primero que un escritor debe escribir  son sus memorias, cuando todavía se acuerda de todo” Y no lo dijo por predestinación sino porque presentía  que la memoria le escaseaba mientras la mirada se le llenaba de nostalgias y poco a poco, lentamente, en el transcurso de 13 años, a partir de 1999  y a raíz de su enfermedad de cáncer linfático, superado con quimioterapia, que hizo evidente la advertencia que   contiene la frase: “más  dañino el remedio que la enfermedad”, las palabras se le volvieron  ausencias sin sentido . Ya en el 2012 el Alzheimer era irreversible, Gabo tenía 85 años y en una nube gris flotaban sus recuerdos. Gabo escribió 100 años de soledad y vivió 4.680 días encerrado en el olvido que se adueñó de él. Borges aseguró que el olvido no existe más allá de la palabra que nombra un vacío.

En un vacío mental vivía García Márquez cuando una investigación de libreros probó que el escritor más vendido era una escritora: J.K. Rowling, la creadora de Harry Potter, el segundo,  es Dan Brown, autor del Código Da Vinci, y el tercero, nuestro premio nobel.
En El amor en los tiempos del cólera, el autor, siempre opositor a cualquier gobierno colombianos, por primera vez en sus novelas y cuentos, hace hablar a un ciudadano que no es radical u opositor de cualquiera de las instituciones, y pone en boca de un personaje:
-  La guerra está en el monte. Desde que yo uso la razón, en las ciudades no nos matan con tiros sino con decretos…
Aló, aló presidente Santos, aló, ¿me lee?



Cortázar dijo que en el cuento se gana por nocaut y en la novela por decisión, la cuestión es de números de rounds… ¿Aguantaremos los colombianos hasta el último asalto?  Por si acaso,  yo me fundí en un personaje que ya tengo escrito, por si acaso ni razono que  empecé  a sonreír bonachonamente como resultado de que olvidé hasta que ya había olvidado…                             

jueves, 14 de abril de 2016

Vida "real" de Cervantes también es ficcion

Vida real de Cervantes también es ficción
Samaria Márquez Jaramillo


Ortega y Gasset dijo de El Quijote: “Lejos, sola en la abierta llanada manchega, la larga figura de don Quijote se encorva como un signo de interrogación”. Esta descripción es aplicable al personaje y también a su creador: En el tema que más ficcionó   Miguel de Cervantes Saavedra fue en su vida, por la que transcurrió echándole doble llave a sus verdades  y novelando sobre sus datos biográficos hasta tal punto que sus biógrafos tienen que confesar que muchas de las circunstancias  que rodean la vida del ilustre minusválido, que no manco,  está llenas de     recodos.
Por ejemplo su nombre: Era hijo de Rodrigo de Carbantes, cirujano-barbero,   y de Leonor Cortinas. Entonces, el nombre del gran escritor era Miguel de Carvantes Cortinas. Lo que sí es claro es que el apellido Saavedra no aparece en los documentos revisados por sus biógrafos y que, en consecuencia, se entiende porque el autor de la obra madre de la novela moderna resalta  sus referencias a la no discriminación, así como  la afirmación de que Dios no le espulga el linaje a nadie es constantes en su obra y aparece de forma explícita en el Coloquio de los perros, donde distingue entre la actitud del “Señor del cielo”, que sólo mira la humildad de corazón de quien a él se dirige, de la de los “señores de la tierra”, que no sólo indagan en el linaje cuando eligen un servidor, sino que “le examinan la habilidad, le marcan los rasgos físicos  y aún quieren saber los vestidos que tiene”.

La idea repetida una y otra vez por Cervantes es que “cada uno es hijo de sus obras” y el linaje lo establecemos cada uno de nosotros con nuestros propios merecimientos, o la falta de ellos. No aludir nunca a su linaje, como si fuese algo que debía ocultarse, delata la existencia, en verdad, de algo que debe ser ocultado.

 El célebre escritor también fue conocido por un pseudónimo que ha perdurado a través de la historia: el manco de Lepanto y en honor a la verdad no fue manco. Sus mejores historiadores aseguran que durante la Batalla de Lepanto, Cervantes recibió tres heridas de arcabuz, un arma larga de fuego antecesora del mosquete y muy utilizada en infantería. El plomo de dos disparos le fue a parar al pecho y el tercero le dio de lleno en la mano izquierda. Tras seis meses en el hospital, las heridas recibidas en el pecho pudieron ser curadas, pero la mano le quedó anquilosada a causa de un nervio que fue seccionado por un trozo de plomo, quedándole inutilizada de por vida. Pero jamás le fue amputada, colgaba inerte de su hombro. El error originó la  leyenda que cuenta que el autor del famoso hidalgo, había perdido un brazo cuando le fue cortado por un turco durante la famosa batalla. En honor a la verdad resultan ficcionales los retratos y pinturas en los que aparece Cervantes, faltándole  el brazo y la mano izquierda. Aunque el incidente del brazo si le fue perjudicial  porque era zurdo y no podía valerse de su mano izquierda.

Cervantes estudió en el liceo, de la vida. Fue autodidacta. No cursó ningún año de enseñanza escolarizada. A saltos y trompicones aprendió algo de mucho. Más información que instrucción. Luego, como fue un intenso lector, recurrió a escritos sobre temas que le interesaban para completar sus saberes de escritor. Situación que hará bajar la cabeza a los que pregonan la aristocracia de los diplomas que no garantizan los saberes. Cervantes fue un lector empedernido. Era uno de los hombres de más ancha formación que había en la España de su tiempo. En sus propias palabras: ‘quien anda mucho y lee mucho, ve mucho y sabe mucho’ ” El hecho de que fuera autodidacta no debe hacerle ninguna merma, sino todo lo contrario: quizá eso le libró de las imposiciones de la enseñanza oficial y le dio más libertad de pensamiento. Entre las muchas lecturas que realizó sin duda dejaron particular huella en él la de los libros de caballerías, que inspiraron El Quijote.  Desde luego, a ello hay que añadir la admiración por el Orlando furioso, de Ludovico Ariosto, libro que Cervantes leyó y releyó en numerosas ocasiones y es una fuente indudable de su genial creación.

Cervantes, eso creo yo, en El Quijote exorcizó sus propios demonios: Don Quijote es un personaje individualista que padece situaciones, muy extendidas, de alienación y personaliza a su creador: Lee y sueña, se encierra, y luego irrumpe en un mundo que solo es real para su imaginación.

En El Quijote el narrador nos presenta, al comienzo, a un hidalgo anónimo, nadie sabe realmente quién es, pero el personaje desea ser alguien y tener un nombre acorde a la condición que anhela. Si se enlazan a Cervantes y el Quijote, creador y personaje, saltará a la vista que es común a ambos la  actitud  social reivindicatoria que se traduce en discursos y en acciones , pensadas mas con la ilusión que con la fantasía: Las prostitutas serán damas y la propia Maritornes será una “fermosa y alta señora”.
El final de la novela nos plantea que el renunciar a la ilusión  tiene consecuencias fatales, y el desarrollo de la misma plantea que, pese a que se deban sufrir revolcones, la única posibilidad de vivir una vida digna está en la lucha constante (no en la evasión constante), porque el verdadero triunfo es permanecer en la lucha misma.
 Vargas Llosa en Una novela para el siglo XXI dice que: “Don Quijote lucha por lograr cambios, modifica y se modifica, pero, lo importante es que vive realmente, no se queda encerrado en su pueblito, se permite ampliar sus horizontes y comprobar  por sí mismo que afuera hay  cosas para hacer y que no son las críticas de los intelectuales provincianos, modelos Medioevo, las que lo detendrán”.


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